Con el argumento de cuidar los intereses de los recolectores de basura, el Sindicato Libertad, conocido por sus actividades y nexos delictivos, busca presionar al gobierno del morenista Armando García Méndez pretendiendo obtener privilegios personales.
Para esto comenzó con la distribución de volantes buscando desestabilizar la armonía entre la población local, a la que le dice que habrá paro de labores y suspensión en la recolección de la basura.
Desgraciadamente, en medio de estas intenciones para extorsionar al gobierno municipal, quedan los trabajadores de limpia que ya son amenazados por este grupo delincuencial para adherirse al sindicato y “sumarse” a su campaña.
Esperamos que las autoridades tomen cartas en el asunto e impidan estos abusos donde los únicos afectados son los trabajadores y la ciudadanía, por un grupo donde sus dirigentes cuentan con antecedentes penales y carpetas de investigación abiertas.
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