El día de los hechos, las víctimas, estudiantes de una escuela secundaria de la zona, después de salir del plantel educativo caminaban por un paraje conocido como “Campo de Futbol El Camello”, ubicado en la colonia La Palma de esta demarcación, cuando un sujeto las interceptó y amagó con un instrumento punzocortante, para obligarlas a trasladarse a la zona boscosa del lugar, donde las agredió, por lo que una adolescente murió en el lugar en tanto que su compañera fue herida, pese a ello, logró huir y pedir ayuda.
Familiares de la joven solicitaron la asistencia de los servicios de emergencia a través de llamada telefónica, los cuales, tras revisar el estado de salud de la víctima, la trasladaron a la Cruz Roja de Naucalpan, situación que fue hecha del conocimiento de la autoridad ministerial, quien acudió a dicha unidad médica a entrevistar a la víctima, quien refirió circunstancias de tiempo, lugar y modo de la agresión, así como algunas características físicas de su atacante, a quien además identificó como un habitante de la zona y al que conocía porque se dedicaba a la recolección de ”pet”, por lo anterior se dio inicio a la investigación correspondiente con metodología de perspectiva de género, respeto a los derechos de las víctimas así como el interés superior de las niñas, niños y adolescentes.
En el lugar referido por la adolescente de identidad J.G.M., se realizó el hallazgo del cuerpo sin vida de una adolescente con visibles marcas de violencia por arma punzocortante, ella fue posteriormente reconocida por sus familiares e identificada con iniciales I.P.M., quien de acuerdo al dictamen médico, fue privada de la vida por una laceración de la vena yugular izquierda, secundaria a herida punzocortante penetrante en cuello.
Asimismo, con base en la información aportada por la adolescente de iniciales J.G.M., el Agente del Ministerio Público desarrolló diversas hipótesis e instruyó realizar acciones investigativas en el lugar de los hechos, con la participación de los elementos de la Policía de Investigación, de la Secretaría de Seguridad estatal y de la Policía Municipal, quienes ubicaron a dos personas que, al ser entrevistados, habrían ofrecido numerario a los elementos policiacos, motivo por el cual los presentaron ante el Ministerio Público por su presunta intervención en el delito de cohecho, además de que, las características físicas de uno de estos individuos coincidían con las descritas por la víctima, quien al ver su fotografía señaló que había una alta probabilidad de que fuera el agresor.
Por su parte, el agente investigador, al confirmar los señalamientos de la víctima dentro de obligada exhaustividad, y aplicar la metodología de perspectiva de género, allegó a la investigación datos de prueba adicionales a través de entrevistas e inspecciones con las cuales se logró establecer que en el lugar de los hechos, de forma habitual acudía otra persona que también se dedicaba a la recolección de “pet” y cuya media filiación podía corresponder a la descrita por la adolescente respecto de su agresor, sin que fuera alguno de los presentados, de quienes se precisó la inexistencia de elementos que los relacionen con las víctimas o las agresiones a ellas, no obstante aún son investigados por el delito de cohecho.
Dentro de los actos de investigación por la comisión de delitos en contra de las adolescentes, uno de los vecinos aportó un video que corresponde al lugar, día y hora en que se registró el evento, en el cual establece que a las 14:20 horas, las víctimas cruzaron la calle de Las Palmas y entraron al paraje donde fueron interceptadas y posteriormente atacadas, en tanto que a las 15:44 horas se visualiza que sale del mismo lugar un masculino de complexión delgada, que vestía pantalón y playera color gris, y llevaba botas de trabajo, además de que en este periodo de tiempo no se observa en el vídeo a otras personas, por lo que se infiere que tanto las víctimas como el masculino coincidieron en circunstancias de tiempo y lugar.
Debidamente acompañada por un psicólogo, el vídeo fue mostrado a la víctima de iniciales J.G.M., quien reconoció al masculino como su agresor, por lo que la investigación se focalizó a la localización de este sujeto y como resultado de las entrevistas recabadas a vecinos, fue identificado como Eduardo “N”, vecino de la zona, dedicado a la recolección de “pet” y a quien señalan como generador de acciones violentas, además de que frecuentemente acude al paraje donde ocurrieron los hechos para consumir estupefacientes.
Durante la investigación inicial, fue ubicado un basurero clandestino a un lado de la casa de Eduardo “N”, lugar en el que fue localizada la ropa con la que se observa al investigado en el video el día de los hechos. Esta vestimenta presentaba machas hemáticas, por lo que fue sometida a un peritaje en materia de química forense, con el cual se determinó que corresponden a sangre humana, además de que, con la pericial en ADN se estableció que existe correspondencia con el perfil genético de la adolescente que murió a causa de la agresión, además de otros dos perfiles genéticos femeninos más que no corresponden a ninguna de las dos víctimas, lo que ha sido motivo de que la Fiscalía realice actos de investigación que permitan identificar quiénes son estas mujeres.
Asimismo, el 26 de septiembre pasado, el Juez de Control Especializado en Línea en Órdenes de Aprehensión y Cateos, del Distrito Judicial de Tlalnepantla, autorizó la técnica de investigación de cateo en el domicilio de Eduardo “N” ubicado en la colonia La Palma, municipio de Naucalpan, lugar donde fueron localizados una mochila y una libreta, objetos reconocidos como pertenencias de una de las víctimas.
Con los datos recabados hasta este momento, se establece la comisión de hechos ilícitos señalados en la ley dentro de los delitos de feminicidio y feminicidio en grado de tentativa, así como la probabilidad de que Eduardo “N” los cometió, por lo que, en términos del artículo 131 fracción XVI del Código Nacional de Procedimientos Penales, se ejercitó la acción penal.
Con base en lo anterior, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, solicitó a la Autoridad Judicial librar orden de aprehensión en contra del invetigado, misma que fue concedida el 26 de septiembre, fecha desde la cual se le considera a Eduardo “N” sustraído de la justicia, por lo que esta Institución realiza acciones para su localización y captura, con el fin de ponerlo a disposición del Juez de Control para que resuelva su situación jurídica con estricto apego a la ley y respeto a los derechos fundamentales.
La Fiscalía del Estado de México, pone a disposición de la ciudadanía el correo electrónico cerotolerancia@fiscaliaedomex.gob.mx, el número telefónico 800 7028770, o bien, la aplicación FGJEdomex, la cual está disponible de manera gratuita para los teléfonos inteligentes de los sistemas iOS y Android, para que, en caso de contar con información que ayude a la localización de Eduardo “N”, lo informe a través de los medios de contacto referidos, además de denunciarlo si tiene información de que este individuo pueda estar implicado en otro hecho delictivo.
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