Decía mi abuelo Camilo: “esos programas en los que se le entrega dinero a los jóvenes sin hacer nada no sirven, ahora que se va a echar a andar un programa que se llama “sembrando vida”, va a ser dinero que causará más daño que beneficio, porque los que lo reciban comprarán su mariguana, alcohol o hasta para que paguen el tiempo de su teléfono celular.
Mi abuelo, un hombre de campo nacido en un pueblo del estado de Querétaro, que a las cinco de la mañana ya estaba preparando sus aperos para irse a su parcela a sembrar, regresaba a su casa al filo de las cuatro o cinco de la tarde… él hablaba de acuerdo a la filosofía de la vida, experiencia producto de su trabajo en el campo.
El programa Sembrando Vida se creó para apoyar al emprendedor y direccionar sus bienes y servicios, hacia los mercados locales e internacionales. Se dijo que estaría orientado a todas aquellas personas, sin límite de edad, que tengan intención de emprender, que estén en proceso de formalizar una idea de negocio o que ya tengan un emprendimiento.Prácticamente el programa Sembrado Vida nace en el marco del Día Mundial del Planeta, cuando se lleva a cabo la Cumbre de Líderes sobre el Cambio Climático, convocada por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, donde participaron más de 40 líderes del mundo, entre ellos el presidente de México Obrador, quien planteó llevar el programa “Sembrando Vida” a los mexicanos.
Sembrando Vida fue presentado el 8 de octubre de 2018 por el ahora Presidente, con el fin de contribuir al bienestar social de sembradoras y sembradores a través del impulso de la autosuficiencia alimentaria, con acciones que favorezcan la reconstrucción del tejido social y la recuperación del medio ambiente, a través de la implementación en parcelas de sistemas productivos agroforestales.
En teoría muy buenas las intenciones.
Sin embargo hace unos días, durante el Parlamento Abierto “Presupuesto de Egresos de la Federación para el Campo 2024″, una mujer rarámuri que se identificó como Rosalba Loya, denunció ante diputados la realidad que se vive en el campo.
Dijo Rosalba Loya: “"Yo soy del estado de Chihuahua, soy 100% rarámuri y siempre he estado en todo esto porque yo no quiero que mis hermanos indígenas, que les dieron Sembrando Vida, nomás se mantengan borrachos por caguamas. Ahora es sembrando nomás caguamas. Entonces, eso no es vida pa´ nosotros, eso no es vida, López eso no es vida".
Rosalba pidió a los diputados hacer bien su trabajo, y que les den la ayuda que necesitan para el campo. La mujer rarámuri exigió que regresen los apoyos con semillas y herramientas, pues, señaló, “hagan bien las cosas, ustedes son nuestros empleados”.
Sí lamentable es la denuncia que hizo Rosalba Loya sobre hechos que seguramente puede estar sucediendo en otros puntos de la República Mexicana, el que el video de la denuncia que hizo la mujer rarámuri se hizo viral en redes sociales, lo más lamentable es que en el gobierno no se reconozca que lo que está fallando se tenga que revisar para un mejor funcionamiento.
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