En Plaza de los Mártires, ahí frente al Palacio de Gobierno en Toluca, en las cercanías del teatro Morelos, estaba un grupo de hombres del campo, quienes habían llegado hasta el lugar para escuchar el Sexto Informe de Gobierno que rindió Alfredo Del Mazo Maza.
Le pregunté a uno de esos hombres del campo.
¿Qué es lo que le pareció que fue lo más importante en el informe del gobernador..?
Su mirada huidiza, volteó de un lado a otro y apoyándose en quien llamó su compadre, al que tomó del brazo, dijo:
“Lo que nosotros oímos que dijo el gobernador, que es importante, es que abrió cuatro centros de naranjas… yo crioque que eso es importante, porque este año estuvo escasa la naranja, entonces con esos 44 centros de naranjas va a haber mucha naranja…”.
Momentos antes el gobernador había destacado en el informe que rindió, la apertura de 44 centros naranjas, llegando a 103, cubriendo el 75 por ciento del territorio mexiquense…
Los Centros Naranja, que dependen de la Secretaría de la Mujer, son espacios que proporcionan consejería a las personas que acudan, respecto a temas relacionados a la violencia de género.
Pero bueno.
Me pregunto, ¿Dónde quedaron aquellas decisiones firmes y resultados fuertes, que Alfredo Del Mazo ofreció como slogan de su campaña?
Seguramente se los llevó el viento.
Alfredo del Mazo habló y habló muy bonito frente a Andrés Manuel López Obrador y Delfina Gómez Álvarez; Al inicio del Informe, Del Mazo agradeció la presencia del Presidente y de la gobernadora electa, a quien reconoció por el proceso de transición de gobierno y por el diálogo sobre las acciones y programas que, dijo, se seguirán impulsando en la entidad.
El gobernador se dirigió al presidente, le dijo: “El Estado de México le recibe siempre con los brazos abiertos y en lo personal, le apreció mucho que nos haya acompañado”; el presidente respondió solamente con un saludo desde el lugar donde se encontraba.
Luego se refirió a la gobernadora electa cuando dijo: “El triunfo de la maestra Delfina Gómez Álvarez es una decisión histórica de los mexiquenses, es la primera vez en que una mujer conducirá el destino de la entidad y el reflejo de los tiempos que vivimos, por su disposición para llevar adelante una transición institucional y constructiva, hago un reconocimiento a la gobernadora electa”, comentó sobre su sucesora.
Bueno más allá de las palabras bonitas, Alfredo Del Mazo le hereda a Delfina Gómez, un estado hundido en la indiferencia gubernamental, un estado que se ha ganado a pulso uno los primeros lugares de feminicidios y donde la inseguridad está latente con los grupos del crimen organizado, que se han apoderado del sur del estado y tienen presencia en los 125 municipios, que conforman el territorio mexiquense.
Pero eso no se dijo y será la herencia nefasta que Alfredo Del Mazo le deja a su sucesora Delfina Gómez Álvarez.
Todo lo anterior en medio del rumor de que Alfredo Del Mazo se integrará a la 4T.
Alfredo Del Mazo se va con la frente en alto, y aunque le falló a los mexiquenses, le cumplió al presidente Andrés Manuel López Obrador.
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